nunca fui muñeca
más bien pistola
disparé muchos tiros al aire
en esa infancia discapacitada
uno rebotó en la pared
y me dio en el pecho
desde entonces
ahorro para la operación
que me quite la bala
que llevo alojada
en el esternón
esa bala es la que
a veces
me impide cantar
y me provoca un hipo
descarado
del que me avergüenzo
en público
ORIGEN y DESTINO del libro Tenemos que hablar y otros cuentos sentimentales
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Las primeras salidas nocturnas por el ambiente las hice tarde. Primero me
enamoré con veintidós años de alguien que no pudo o no quiso corresponderme
com...
Hace 1 mes
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