miércoles, 18 de marzo de 2009

noia mirant per la finestra

la luz vuelve a despertarme
a las siete de la mañana
cambio las cortinas moradas
por las azules profundas
rechazo la mañana
como otros rechazan
el desayuno cuando rezan
doy vueltas en mi limbo
corro alrededor del circuito
mi bicicleta persigue la liebre
de cualquier cigarrillo sale humo
eso lo sé lo he visto
del mismo modo que la crisis
amenaza la estabilidad
no importa si los bancos
me dan crédito
escribo en mi cuaderno
que la fe se mantiene
el crédito me lo dan mis propias
palabras tiznadas de carbón
cuando se limpia la chimenea
se suele acabar negra
pero para pintar la casa
debo ducharme primero
y alcanzar el equilibrio
entre la luz y la oscuridad
si todos somos sombras
tal vez los paraguas nos ayuden
a capear el sol y la lluvia
no olvidemos que sirven
para ambas cosas
los esqueletos de los peces
han vuelto a instalarse
en el pecho desnudo
soplo en las esquinas
las velas de los días
cada día tiene un triunfo
entre sus horas
no te creas no lo olvido
tampoco estoy segura
de querer olvidar
la memoria siempre
me ha parecido historia
los cuerpos enterrados
amanecen al descubierto
cuando las inundaciones llegan
remo y remo
a la barca le falta motor
o tal vez es la gasolina
que los árabes han decidido
no vender más hasta
que les dejemos construir
una mezquita en nuestro corazón
me desoriento
pero no me pierdo
voy para volver
y ahora toca lo tangible
comer trabajar escuchar las noticias
prepararse al fin y al cabo
para todos esos ratos
en los que echamos a un lado
nuestras carencias
nuestros anhelos
los dolores del alma
y esos laberintos que nos pierden
cuando decidimos tapar
con una cortina azul la luz
de la mañana
pero es que
querida
a veces la luz ciega
y es imprescindible
dosificarla
para seguir comprendiéndola

en el fons
només sóc un noia
mirant per la finestra

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