martes, 9 de febrero de 2010

lluvia, tierra, surco

mi mirada nítida se pierde
en la transparencia de la lluvia

no deseo otra cosa que la tierra
susurrando redención
y mi alma volviendo a creer
en que lo humano no es maldad

alguien ara surcos y siembra
corazones arrancados

no sé cómo la tierra ha absorbido
tanta sangre

y aún así la lluvia
prosigue su labor curativa

No hay comentarios: