miércoles, 14 de marzo de 2018

Oda breve a unos pétalos rojos en el suelo de un vagón de metro




Se deshojó la rosa
se deshojaba
en el vagón de cabeza
con esperanza brava.

Se desnudó la rosa
se desnudaba
con pausa de niebla
y el palpitar a tientas.

Se descocó la rosa
se descocaba
y me dejó un mar
con espuma de alma.

Se despidió la rosa
se despedía
en la mañana alegre
de una imagen breve.

Ay la rosa
Ay la rosa
Cómo se despoja
de la vida
y de lo que le sobra.

Ay la rosa
Ay la rosa
Cómo pervive
siempre
con tinta indeleble.


(*) Fotografía de Gertrudis Losada Alva.

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