sábado, 29 de octubre de 2011

Adiós definitivo a mi lucha por tu amor

Cómo me gustaría decirte hoy:
'el amor al fin guía mis pasos'.
Cómo me gustaría...
Pero no me sale bien mentir
ni aún en versos que huelen a utopía.
Si alguna vez he mentido
enseguida se ha impregnado
en perfume de derrota
mi poesía herida
y es que los versos
son como radiografías,
eluden el paisaje exterior de las fotografías
y se centran en el esqueleto de las palabras
del alma.
Pero si hoy de nuevo me enfrento
a tu borroso y deformado recuerdo
no es para volver a matarte y resucitarte
dentro de la jaula del lenguaje,
solo es para expresarte mi pésame
con la sinceridad abrupta de la examante perfecta.

Ya nunca más me aferraré a tu mirada
-ni aún cuando todo vuelva a estar perdido-
ya nunca más vivirás de las migajas de mi almohada
ya nunca más, ya nunca más serás la más amada.

En esta mañana macerada por una luz que atraviesa
las nubes del cielo, una mañana sobria y triunfal por los delirios
sordos de la memoria, te digo adiós,
adiós con toda la verdad de mi alma.

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